La craneotomía es una intervención que data desde finales del siglo XIX(1), en el que se extrae una parte del cráneo para que el neurocirujano tenga visible el cerebro y realizar una extracción, reparación o drenaje de la zona. En los siguientes bloques te explico en detalle qué es una craneotomía, cuándo se lleva a cabo, su procedimiento paso a paso y más información de interés.
Qué es la craneotomía
La craneotomía es una cirugía en la que se extrae una parte del cráneo para poder dejar el cerebro visible y poder acceder a él. En función de cuál sea la parte extraída, puede tratarse de una cranetomía frontal, temporal o frontotemporal.
Una vez el neurocirujano ha realizado la intervención correspondiente en el cerebro del paciente, la parte de hueso extraída es devuelta a su lugar original. Todo esto no implica ningún tipo de dolor para la persona, ya que permanece anestesiada habitualmente de forma general, aunque en ocasiones puede ser exclusivamente local.
Es posible que si escuchas a un profesional de la medicina hablar sobre esta cirugía, le escuches hablar sobre el ‘colgajo óseo’. Esto es, nada más y nada menos, la parte del cráneo que es extraída y posteriormente devuelta a su lugar de origen.
Cuándo se realiza la craneotomía
La craneotomía se practica para acceder a una parte del cerebro. Los motivos de realizar esta intervención son diversos, ya que tiene múltiples aplicaciones. Las más comunes son las siguientes:
- Extirpar un tumor cerebral: esto aplica tanto a tumores benignos como malignos.
- Aliviar presión intracraneal: cuando el paciente ha sufrido un traumatismo craneoencefálico o un accidente cardiovascular, una craneotomía facilita la extracción de sangre, que alivia la presión intracraneal.
- Reparaciones de vasos sanguíneos: en los casos que la persona ha padecido, por ejemplo, una aneurisma cerebral, el neurocirujano puede reparar un vaso débil y prevenir su ruptura.
- Extraer muestras de tejido encefálico
Además de estas causas, la craneotomía tiene otras aplicaciones para devolver al paciente a una vida sin complicaciones, como frente a hematomas, drenaje de abscesos o la reparación de membranas del cerebro. Por este motivo, un médico puede recomendar esta intervención tras estudiar el diagnóstico del caso.
Procedimiento de la craneotomía
El procedimiento para llevar a cabo una craneotomía es relativamente sencillo. En primer lugar, el paciente es anestesiado y colocado en la posición pertinente: boca arriba, boca abajo o de lado.
La anestesia que suele utilizarse es general, si bien algunos profesionales de la medicina han aplicado una anestesia local. Sin embargo, esta práctica es poco común en la actualidad y en la gran mayoría de casos suele aplicarse la general.
Acto seguido, comienza la incisión sobre el cuero cabelludo en función de lo que requiera la intervención en cada caso. Este corte se realiza en las zonas donde crece el cabello, por cuestiones estéticas en favor del paciente, pues este aspecto también es importante para que su autoestima y estado de ánimo no se vean afectados tras la operación.
Realizada esta incisión, el neurocirujano emplea un craneótomo (instrumental quirúrgico que puede utilizar diferentes piezas en función de la necesidad) para abrir una ventana desde la que dejar visible el cerebro. Hecho esto, comenzaría el siguiente procedimiento, ya se trate de una extracción, reparación, drenaje…
Finalmente, el equipo reconstruye la zona que ha quedado abierta. Esto asegura que el líquido cefalorraquídeo permanezca dentro de la estructura del cráneo y no haya fugas del mismo.
Secuelas de la craneotomía
Las secuelas de la craneotomía cada vez son menos, gracias al avance de la medicina en cuanto a técnicas e instrumental. Con ello, tras pasar por esta cirugía el paciente puede experimentar cierto dolor en la zona intervenida, al igual que hinchazón y hematomas.
Aunque estos efectos son los más comunes tras una craneotomía, la persona también puede presentar cefaleas durante un tiempo. Otras alteraciones neurológicas, como la debilidad muscular, pérdida de sensibilidad o convulsiones son menos comunes, aunque también posible.
Cabe destacar que la craneotomía es una intervención que se lleva a cabo de forma relativamente común. Por este motivo, las secuelas suelen ser mínimas, aunque cada caso es un mundo y las características del paciente pueden hacer que la recuperación sea más lenta.
Diferencias entre craneotomía y craniectomía
La diferencia entre la craneotomía y la craneotomía es simple, aunque muy relevante. En el caso de la craneotomía, la parte del cráneo extraída vuelve a colocarse en su lugar cuando la intervención del cerebro. Por otro lado, en la craniectomía el hueso se reemplaza con un material artificial o es depositado en un banco de huesos para volver a ser colocado más tarde.
El procedimiento en ambos casos es el mismo, pues aplica a una parte del cráneo que se extrae. La anestesia e incisión, por tanto, también comparten características comunes.
El motivo de realizar una intervención u otra depende del caso. Aquí influyen factores como el motivo de la cirugía, cómo de extensa es la zona afectada del cerebro y las características del propio paciente.
Preguntas frecuentes sobre la craneotomía
¿Cómo queda la cabeza después de una craneotomía?
La cabeza de un paciente que pasa por una craneotomía puede presentar dolores, rigidez y coágulos de sangre. Por este motivo, es verdaderamente importante mantener informado al neurocirujano que realiza el seguimiento de su caso para que esté al tanto, al igual que seguir en todo momento sus indicaciones.
¿Cuánto tiempo duele la cabeza tras una craneotomía?
Dependiendo de cómo se haya desarrollado la intervención y las características del paciente esto oscila desde varias semanas hasta casi tres meses. Habitualmente el profesional le recetará una serie de fármacos para paliar los síntomas tras esta cirugía, sin que interfieran en la recuperación ni provoquen complicaciones posteriores.
Es de vital importancia que nunca se automedique, en general, y mucho menos tras una intervención de este tipo. Acuda a su médico si tiene cualquier duda sobre cómo aliviar los síntomas de la craneotomía.
Referencias bibliográficas
González-Darder, J. M. (2016). Historia de la craneotomía. Neurocirugía, 27(5), 245-257. https://doi.org/10.1016/j.neucir.2016.02.002
Chui, J. (2015). Anesthesia for awake craniotomy: An update. Colombian Journal Of Anesthesiology, 43, 22-28. https://doi.org/10.1016/j.rcae.2014.07.003