TAC: ¿Qué es y por qué lo piden los médicos?

En series, películas y hasta en conversaciones de sobremesa. Todo el mundo ha escuchado en su vida la palabra TAC, pero muy poca gente -fuera del entorno médico- sabe qué es y para qué sirve.

Esta prueba médica es una de las más solicitadas por los doctores desde hace años por su utilidad, tanto dentro de la neurocirugía como en otras especializaciones médicas. Sin embargo, ¿sabes en qué se diferencia con una radiografía? ¿o con una resonancia magnética? ¿conlleva algún riesgo para el cuerpo humano esta prueba? ¿para qué sirve?

Para que puedas responder a estas y muchas otras preguntas hemos preparado este artículo sobre la tomografía axial computarizada, o TAC. Acompáñanos y descubre todos los detalles de esta prueba que ha causado un impacto sin precedentes en la comunidad médica.

¿Qué es un TAC?

Las siglas de TAC significan “tomografía axial computarizada”. Es una prueba que se utiliza para realizar diagnósticos a pacientes a través del uso de rayos X (radiaciones ionizantes). Con ella, el especialista consigue imágenes radiográficas del interior del cuerpo en dos o tres dimensiones.

Según la Sociedad Española de Radiología Médica (SERAM), en España se realizan más de 40 millones de pruebas de imagen al año. El 18% de ellas son TACs, lo que supondría alrededor de 7.200.000 solo en nuestro país. (1)

Así, el TAC se realiza en el interior de una máquina que envía los rayos X a través del cuerpo humano para que, después, estos impacten sobre la radiografía. Con ello, el médico consigue una imagen del interior del cuerpo.

¿Qué tipos de TAC existen?

Dependiendo de las necesidades a la hora de realizar un diagnóstico, puede necesitar de un tipo de tomografía axial computarizada u otro. Estos son los tres tipos de TAC más comunes:

• TAC con contraste: Este tipo se utiliza para delimitar y diferenciar ciertas zonas de nuestro cuerpo que, de otra manera, no podrían verse de manera clara. La tomografía axial computarizada con contraste se realiza a través de la ingesta o inyección, por parte del paciente, de un líquido de contraste antes del procedimiento. Después, el procedimiento es el mismo que en un TAC sin contraste.
• TAC sin contraste: Es más habitual que el anterior, pues en muchos procedimientos no es necesario utilizar contrastes. Esto es debido a que hay muchas zonas de nuestro cuerpo que se pueden ver con detalle sin necesidad de ningún tratamiento previo.
• TAC en 3D: Actualmente este tipo de prueba continúa en desarrollo, aunque ya se está empezando a incluir en España. Gracias a la tomografía axial computarizada en tres dimensiones, los doctores consiguen recrear fielmente a escala tanto huesos como órganos. Esto es especialmente útil a la hora de estudiar un caso antes de una intervención quirúrgica.

¿Cómo se hace un TAC?

La prueba de la tomografía axial computarizada se realiza en el interior de una sala donde se encuentra una camilla tras la que hay una máquina con forma de donut, a forma de cabecero.

El paciente se tumbará en la camilla, que se desplazará durante unos segundos al interior del escáner. Esta prueba no produce claustrofobia a aquellas personas que tengan miedo a los espacios cerrados, pues el escáner es lo suficientemente amplio y en ningún momento se cierra al paciente.

Generalmente, antes de comenzar con la prueba se pide al paciente que se cambie de ropa para ponerse una bata del hospital y que deposite temporalmente los objetos metálicos en una bandeja.

Sin embargo, en un TAC craneal no tiene por qué ser estrictamente necesario un cambio de ropa. En este sentido, depende del criterio del personal médico que le realice la prueba.

Debe quedar claro que el TAC es una exploración muy segura, de corta duración y en la que el paciente es vigilado por uno o varios especialistas en una sala contigua en todo momento.

¿Cómo prepararse para un TAC?

Su doctor le pedirá que se mantenga en ayuno hasta pasada la prueba, sin ingerir ni beber nada. Asimismo, es importante que hable con su doctor si existe la posibilidad de que esté embarazada.

Cualquier información que pueda aportar al doctor será positiva, como alguna condición médica particular que sufra, si ha pasado por alguna enfermedad recientemente, si está tomando algún tipo de fármacos o si tiene alguna alergia. Esto servirá tanto para el TAC como para el resto del diagnóstico de su enfermedad.

Asimismo, su médico le informará que no puede llevar ningún tipo de elemento metálico a la sala donde se realiza el TAC, como llaves, collares, relojes o cinturones, entre otros.

¿En qué se diferencia un TAC de una radiografía?

Por una parte, en una radiografía se produce un único golpe de radiación. Por otra parte, en un TAC el doctor busca una mejor visión y, para ello, la prueba da una secuencia de imágenes computarizadas que pueden llegar a ser cientos que, finalmente, conforman una sola.

Según un estudio de Statista, el número de escáneres TAC en España no ha hecho más que aumentar en la última década. En 2010, contábamos con 743 aparatos de tomografía axial computerizada en nuestro país, mientras que en 2019 ya había 905 repartidos por toda la geografía española. (2)

En este sentido, podemos afirmar que un TAC es una suma de múltiples radiografías a la vez realizadas desde diferentes ángulos para conseguir una imagen más amplia y detallada de una zona del cuerpo humano.

¿Para qué sirve un TAC?

La tomografía axial computarizada se utiliza para hacer diagnóstico por imágenes de diferentes patologías, enfermedades y malformaciones presentes en el cuerpo humano. Es común su uso en la neurocirugía, así como en otras especialidades médicas.

Algunos de los usos que se dan con un TAC son:

• Examinar el tórax, abdomen y pelvis.
• La detección de enfermedades vasculares que pueden derivar en derrames cerebrales e insuficiencias renales, entre otras. En este campo, el TAC se utiliza para descubrir la presencia, o no, de coágulos de sangre en los vasos pulmonares (o émbolos pulmonares) así como de aneurismas aórticas.
• Estado de los huesos y órganos de un paciente que ha sufrido un fuerte traumatismo, por ejemplo, a causa de un accidente de tráfico.
• Detección de cánceres en el tórax, abdomen y pelvis, junto a los linfomas y cánceres de pulmón, hígado, riñón y páncreas. En este área, el TAC es considerado el mejor método para confirmar la presencia, o no, de un tumor, medir su tamaño, conocer su ubicación y saber el alcance que puede tener sobre los tejidos cercanos.

Asimismo, el TAC puede ser utilizado en pacientes jóvenes, incluso en aquellos que todavía atienden al área pediátrica. Sin embargo, en este tipo de pacientes es una prueba que solo se utiliza si existen indicios de enfermedades graves. Así, con la tomografía axial computarizada se pueden detectar, en pacientes pediátricos:

• Linfomas
• Tumores de riñón
• Malformaciones congénitas de corazón, riñones y vasos sanguíneos
• Complicaciones de apendicitis aguda
• Complicaciones de neumonía
• Enfermedad inflamatoria del intestino
• Fibrosis quística
• Neuroblastoma

¿Cuánto dura un TAC?

Otro de los beneficios del TAC, más allá de la claridad y detalle que aporta en sus imágenes, es la rapidez del escaneado. Generalmente, esta prueba tiene entre veinte segundos y medio minuto de duración.

Gracias a esto, la radiación que se transmite al paciente es mínima y el envío de imágenes al ordenador es casi instantáneo. De esta manera, los especialistas en neurocirugía u otra especialidad médica pueden observar la información que muestra la prueba para, así, planificar la intervención.

¿Cuáles son las ventajas de un TAC?

A través de una tomografía axial computarizada, un especialista médico podrá comprobar el estado de sus huesos, órganos o vasos sanguíneos de manera detallada y precisa. De hecho, esta prueba -a diferencia de los rayos X- permite captar imágenes de huesos, tejidos blandos y vasos sanguíneos al mismo tiempo.

Además, este es un proceso verdaderamente rápido e indoloro, que no requiere ningún tipo de intervención y en el que el paciente permanece consciente todo el rato. En este sentido, la exactitud que brindan sus imágenes permite a los médicos realizar un diagnóstico preciso.

Por otra parte, después de realizar este examen, según los desarrolladores de los sistemas de tomografía axial computarizada, no quedan restos de radiación en el cuerpo humano. Con ello, a diferencia de la resonancia magnética nuclear (RMN), el tener implantado un aparato médico no será un impedimento para poder ser examinado a través de un TAC.

En casos de emergencia, un TAC puede mostrar lesiones y hemorragias internas con suficiente rapidez como para salvar vidas.

¿Cuáles son los riesgos de un TAC?

Actualmente no existe ninguna prueba de que la cantidad de radiación emitida por un TAC provoque enfermedades en un ser humano. Sin embargo, existen ciertas contraindicaciones que debe tener en cuenta y, por ende, comunicar a su médico antes de hacerse esta prueba:

Las mujeres que estén o crean que pueden estar embarazadas deben informar a sus médicos. En general, los médicos no suelen recomendar el TAC a mujeres embarazadas a no ser que sea médicamente necesario por un riesgo ya existente para el bebé que está por nacer.

Las personas que estén tomando metformina deben suspender el tratamiento y, por otra parte, aquellos pacientes que sean alérgicos al yodo deberán comunicarlo. El yodo está presente en el líquido de contraste, aunque el riesgo de una reacción alérgica a este material es extremadamente rara. Sin embargo, este y cualquier otro detalle es importante que sea transmitido al equipo.

En el caso de los niños, los TAC deben ser realizados únicamente si son estrictamente necesarios a la hora de realizar un diagnóstico. En esta línea, no se les debería hacer tomografías axiales computarizadas de manera repetida a no ser que fuera necesario.

Conclusiones

La tomografía axial computarizada es una de las pruebas más comunes antes de una intervención quirúrgica tanto en el campo de la neurocirugía como en otros. Su rapidez, fiabilidad y exactitud permiten al doctor tener una imagen clara de la zona afectada.

Esta prueba es especialmente útil a la hora de hacer diagnósticos. Por ello, desde odontólogos, radiólogos, especialistas en neurocirugía hasta cardiólogos -junto a un largo etcétera- utilizan esta prueba a diario para planificar intervenciones.

La tomografía axial computarizada ha supuesto una revolución en la medicina desde sus inicios, en 1974, hasta su desarrollo en la actualidad. La obtención de radiografías en tres dimensiones será, probablemente, una tendencia de cara al futuro a la hora de estudiar casos clínicos antes de entrar en quirófano.

Referencias bibliográficas

(1) Seram, P. (2022, 8 noviembre). En España se realizan más de 40 millones de pruebas de imagen al año, según la Sociedad Española de Radiología Médica (SERAM) – SERAM. SERAM. Recuperado 25 de julio de 2023, de https://seram.es/en-espana-se-realizan-mas-de-40-millones-de-pruebas-de-imagen-al-ano-segun-la-sociedad-espanola-de-radiologia-medica-seram/

(2) Statista. (2022, 22 junio). Escáneres de TAC España 2010-2019. Recuperado 25 de julio de 2023, de https://es.statista.com/estadisticas/573331/escaneres-de-tac-en-espana/